En los últimos años, y concretamente en los últimos meses debido a la situación producida por el Covid-19, muchas empresas se han visto obligadas a adaptarse y cambiar la forma de trabajar para poder adaptarse a un entorno digital. Desde Doonamis, sabemos que la transformación digital para una empresa no siempre es un proceso fácil y sencillo, es por este motivo que queremos aprovechar este artículo para incidir en la importancia de digitalizar procesos internos y facilitar la gestión del cambio.
La importancia de los procesos de transformación digital
La transformación digital se ha convertido en un factor cada vez más relevante en todo el mundo y en el sector empresarial y es que actualmente, la transformación digital se ha convertido en un elemento imprescindible para todo tipo de empresa.
Pasos a seguir para digitalizar procesos internos de tu empresa
Para poder realizar una buena digitalización de los procesos internos para tu empresa es necesario seguir una serie de pasos que comentaremos a continuación:
- Evalúa la situación de tu empresa: La primera fase, y una de las más importantes, es evaluar la situación de tu propia empresa. De esta manera, se debe analizar y realizar un diagnóstico del punto en el que se encuentra y cómo funciona la organización. A través de este análisis, podrás reconocer cuáles son tus necesidades y establecer unos objetivos en función de estas.
- Desarrolla estrategias para la digitalización: Tras haber desarrollado un exhaustivo análisis, será necesario desarrollar una estrategia para llevar a cabo el proceso de digitalización. En esta estrategia, se deberá establecer cómo serán los procesos de trabajo y qué se pretende alcanzar con la digitalización.
- Formación a los empleados: Tal y como comentamos en nuestro artículo sobre los Inventos tecnológicos que ayudan a la transformación digital, es necesario formar digitalmente a los empleados. Esto se debe a que es necesario que la tecnología seleccionada esté implementada de manera transversal en todos los departamentos necesarios de la empresa para que, así, los empleados puedan adaptarse correctamente a la transformación digital.
- Selección de las herramientas: Una vez hayas analizado tus necesidades y hayas establecido una estrategia, será necesario seleccionar las herramientas en función de ella. Es importante destacar que aquellas tecnologías que seleccionen deben aportar un valor diferencial a tu empresa, y, también, se debe tener en cuenta cómo serán utilizadas y cómo será el proceso de adaptación.
- Implementación de la herramienta: Finalmente, se procederá la implementación de la herramienta en el funcionamiento y en la operativa diaria de la empresa.
Los beneficios de digitalizar tu empresa
Tras haber comentado la importancia de los procesos de transformación digital y cómo realizarlos, consideramos de relevancia destacar los beneficios que se obtendrán si se digitaliza tu empresa:
- Mejora la gestión y la operatividad: Uno de los beneficios más importante es la mejora en la gestión, en el servicio al cliente y en la efectividad del trabajo que se realiza.
- Aumenta la productividad: Como consecuencia del primer beneficio, se aumenta la productividad de los trabajadores ya que trabajarán mediante unos procesos laborales más ágiles, que permiten detectar posibles problemas y encontrar soluciones de manera más rápida.
- Reducción de costes: Mejorar los procesos y aumentar la productividad provocan una directa y beneficiosa reducción de costes. Mediante la digitalización, las empresas pueden aumentar también su competitividad empresarial y por lo tanto, aumentar su valor diferencial.
Cuidado del medio ambiente y generación de nuevas oportunidades de negocio
Como consecuencia de la preocupación cada vez más generalizada por el medio ambiente, ha surgido un nuevo concepto que relaciona el cuidado del medio ambiente y las empresas, concretamente, estamos hablando del concepto Green IT.
Green IT hace referencia al uso de las tecnologías de una manera sostenible, es decir, propone realizar un uso eficiente de los recursos para hacerlo de una manera respetuosa con el entorno. Lo que se pretende mediante este tipo de uso es minimizar el impacto que tienen las tecnologías en el medio ambiente.
Concretamente, utilizar las nuevas tecnologías de manera sostenible y responsable, puede formar parte de la estrategia planteada en cuanto a responsabilidad social corporativa y demostrar así, un compromiso real por parte de la empresa.
